Cuaderno de artista: Una experiencia de autoconocimiento

(Diario de Artista de Lía Sabela)

Por: Maribel Padrón

Lía también fue otra de mis estudiantes de Diario del Artista: Un viaje a mi mundo interior. Una asignatura electiva que dicté en el IUESAPAR** (que luego pasó a integrar la UNEARTE*). Alguno podría preguntarse: ¿Y todas las reseñas sobre experiencias con diarios artísticos serán de estudiantes de ese lugar? – Pues, sí, por el momento sí; porque esta experiencia nació allí y ellos, mis estudiantes, fueron los primeros que me demostraron la versatilidad, utilidad y profundidad de esta rica experiencia.

Lía Sabela nace en Los Teques, capital del Estado Miranda, el 20 de junio de 1984. Sus primeros estudios a nivel profesional versaron sobre el Diseño Industrial, en el Instituto de Diseño de Caracas. Lo ejerció y pronto notó que necesitaba mayor libertad para expresar sus ideas, lo que la condujo a estudiar Artes Plásticas. Su mención formal fue escultura, sin embargo, se considera una artista multidisciplinar, pues expresa a través de diversos materiales y técnicas, como la pintura, el collage, medios digitales, e instalaciones, además de la escultura.

Ha llevado diarios desde pequeña y por supuesto que estos han evolucionado con su experiencia de vida hasta convertirse en unos cuadernos llenos de ideas, pensamientos, reflexiones y proyectos artísticos. Es de las personas que colecciona cuadernos. Los tiene, comprados, regalados, creados y hechos por ella; en diferentes formatos y estilos de encuadernación.

Por un tiempo estuvo diseñando telas con patrones basados en diseños en los que ha venido trabajando por más de 20 años, y que representan el elemento que siempre la acompaña. Ella los divide en dos formas básicas, las orgánicas y las ondas, lo cual se nota claramente en casi todos sus dibujos. Con el tiempo se ha dado cuenta que al trabajar en tales patrones, se concentra al punto de perder la noción del tiempo, es decir, para Lía son una forma de meditación activa.

Comenta que puede guardar un cuaderno por años, hasta que encuentra el objetivo exacto para él. Es de las personas que lleva varios diarios simultáneos para registrar procesos diferentes. Tiene uno grande de proyectos a desarrollar, otro para dibujo diario, uno personal en el que escribe sus reflexiones y sucesos. Otro lo dedica a registrar “curiosidades”: ideas, citas o pensamientos producto de lecturas, videos o poscat con los que investiga y profundiza en temas de interés. Tiene otro para dibujar patrones que usa como desestresante, y hasta uno que usa para registrar su planificación semanal y “listas de cosas por hacer” y al que llama el “cuaderno feo”, pues allí escribe sin cuidado, con tachaduras, correcciones y tintas de diferentes colores.

Como a muchos nos ha pasado, siente satisfacción cuando termina un cuaderno, pues lo percibe como un ciclo que ha cerrado. Tal vez, porque se define como una persona a quien le encanta explorar, y luego de “experimentar” un tema todo lo que pudo, lo deja y pasa al siguiente y claro, como cada cuaderno tiene un objetivo específico, deja de trabajar en él. En nuestra conversación notó que, tal vez, dejar la experimentación de un tema, es sólo el cierre de una etapa; aunque puede que más adelante descubra una inflexión que le permita reabrir una vieja exploración, como ya le ha pasado. Esto sucede porque Lía tiene el buen hábito de revisar sus diarios, cuadernos y anotaciones para redescubrir, chequear y verificar sus avances y evolución. Por ejemplo, notó que sus aprendizajes y vivencias se expresan como ciclos; o que ha estado trabajando mucho con el cuerpo, inconsciente antes, ahora conscientemente.

Para Lía, los cuadernos o diarios le han permitido autoconocerse. Se enfrenta con procesos muy íntimos y personales que le reflejan constantemente quién es, en ese momento particular de su vida. Qué busca en su interior y qué refleja en sus reflexiones, incluyendo su lenguaje plástico.

La serie “El beso, el abrazo y el baile”, que surgió del primer cuaderno que terminó y que contiene los ejercicios de “un dibujo diario en tiempos de pandemia”,  expresa uno de los temas de interés actual de Lía: las interacciones sociales, la falta que hacen y lo mucho que las hecha de menos. También ahonda en el papel del hombre en el Universo; cómo estamos conectados; cómo el individuo, con su energía y vibración, conforma El Todo cuando se junta con otros individuos con la misma intención.

Quiere que el público note en su propuesta la irrupción de colores y formas irregulares y/o sutiles que nacen de imágenes familiares y cotidianas, como nuestros cuerpos, pero que son representadas de manera abstracta o sugerente. Quiere invitar al espectador a la introspección, a reflexionar sobre su lugar en el mundo y con respecto a los demás, aspira que lleguemos a la conclusión de que si actuamos bien con nosotros mismos, podemos ser mejores con quienes nos rodean.

Aunque refleja tranquilidad por fuera, Lía tiene una mente muy activa. Siempre está pensando en cómo crear, transformar e intervenir algo. Se inspira en cualquier cosa, circunstancia o hecho. Le gusta experimentar con lo que le interesa hasta sentir que lo agotó, al menos por el momento.

Ella, Lía Sabela, es una de las hacedoras más constantes y dulces con las que me he tropezado.

Gracias por compartirnos tu experiencia y por abrir tu corazón.

Lía Sabela: @liasabela
Maribel Padrón: @viajeamiinterior

* Universidad  Nacional Experimental de las Artes.
** IUESAPAR: Instituto Universitario de Estudios Superiores de Artes Plásticas Armando Reverón

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